Pedales de carretera: tipos, diferencias y cómo elegir
Los pedales son uno de los tres puntos de contacto con la bici (junto con el sillín y el manillar). En carretera, elegir el sistema adecuado puede marcar la diferencia en comodidad, transferencia de potencia y seguridad. Aquí tienes una guía práctica para entender las opciones más usadas y cómo decidir cuál es la tuya.
¿Por qué usar pedales automáticos?
- Mayor eficiencia: transmites la potencia en todo el ciclo de pedaleo, no solo al empujar hacia abajo.
- Mejor control: el pie queda fijo, más estabilidad en sprints y descensos.
- Postura más natural: evitas movimientos extraños del pie y cuidas las rodillas.
Principales sistemas en carretera
1. Shimano SPD-SL
Uno de los sistemas más extendidos en carretera. Fáciles de usar, fiables y con amplia disponibilidad de calas.
- Ventajas: gran superficie de apoyo, calas con opciones de flotación (amarilla 6°, azul 2°, roja 0°), repuestos fáciles de conseguir.
- Inconvenientes: algo más pesados que otros sistemas, calas voluminosas para caminar.
2. Look Keo
Pioneros en pedales automáticos de carretera, siguen siendo referencia en competición.
- Ventajas: muy ligeros, amplia gama de modelos, calas con distintos grados de flotación (negra 0°, gris 4,5°, roja 9°).
- Inconvenientes: algo más delicados en durabilidad, requieren ajustes finos de tensión.
3. Wahoo Speedplay
Un sistema diferente, diseñado para ofrecer precisión y rendimiento máximo. Con enganche por las dos caras, aportan una sensación única de conexión con la bici.
- Ventajas: enganche por las dos caras (más fácil en salidas rápidas), regulación avanzada de la cala en tres ejes (posición, flotación y ángulo), y un diseño muy aerodinámico. Además, permiten una personalización que otros sistemas no alcanzan.
- Consideraciones: la instalación de las calas es más técnica que en Shimano o Look, pero una vez ajustadas apenas requieren atención. Son ideales para ciclistas que buscan afinar al detalle su postura y sensaciones.
¿Qué tener en cuenta al elegir?
- Nivel y uso: para entreno y grupeta, Shimano o Look son opciones fiables. Para competición o ajuste fino, Speedplay destaca.
- Flotación: si tienes problemas de rodilla, mejor calas con grados de movimiento (Shimano amarillo, Look rojo o gris, Speedplay regulable).
- Peso: si buscas ligereza extrema, Look Carbon o Speedplay Nano.
- Sensaciones: Shimano y Look ofrecen tacto familiar y probado; Speedplay aporta una conexión directa y muy personalizable.
Consejos prácticos
- Cambia las calas cuando estén muy gastadas: evitarás enganches defectuosos.
- Ajusta la tensión del pedal poco a poco hasta encontrar tu punto.
- Dedica tiempo inicial a ajustar bien las calas Speedplay: ganarás en comodidad a largo plazo.
Conclusión
No hay un pedal “mejor” universalmente. Hay uno que se adapta mejor a tu forma de pedalear, tus objetivos y tus rodillas. En Dog Days podemos asesorarte, dejarte probar opciones y recomendarte el sistema más adecuado para ti.
Recuerda: un buen pedal puede cambiar tu experiencia sobre la bici tanto como unas ruedas o un sillín.